El pisco Santa María Magdalena es uno de los pocos producidos en el mismo valle de Pisco y cuya elaboración se concibe desde la siembra de las uvas. Con solo dos años en el mercado, ya ha ganado los más importantes premios internacionales y se está erigiendo como la bebida bandera de la nueva generación.
Chilcano, pisco sour o algarrobina son algunos de los cócteles que suelen venir a la mente cuando se piensa en pisco. A pesar de su gran calidad, pocas veces se consume puro o se lleva a la casa en forma de obsequio. De todo ello fue consciente Alejandra Jordan, gerenta general de la Bodega Santa María Magdalena, cuando junto a su papá decidió lanzar al mercado un nuevo pisco pensado exclusivamente en las nuevas generaciones que pudiese ser considerado un pisco de muy alta calidad.
Lo llamaron Santa María Magdalena porque ese fue el nombre que los españoles, a su llegada al país, dieron al valle de Pisco, y fue en aquella misma época en la que se elaboró el destilado por primera vez.
“Queremos revalorizar el pisco, y por ello hemos pensado en las nuevas generaciones, que quieren atreverse a experimentar y probar cosas nuevas”, explica Alejandra.
UN PISCO NACIDO EN PANDEMIA
El pisco Santa María Magdalena fue concebido en 2020, en plena pandemia. A pesar de no ser una bodega antigua, sí es una de las pocas que están ubicadas en Pisco y cuya elaboración empieza desde la siembra de las uvas, pasando por su cuidado y cosecha, hasta el etiquetado de sus botellas. “Sin duda, este es uno de nuestros grandes diferenciales”, comenta.
Actualmente, Santa María Magdalena cuenta con catorce hectáreas que producen cuatrocientas toneladas de uva. Sus suelos francoarenosos y terrosos han dado vida a seis variedades de este espirituoso: Quebranta, Moscatel, Italia, Mollar, Albilla y Torontel. Los dos últimos son los más vendidos y reconocidos por sus clientes.
RECONOCIMIENTO INTERNACIONAL
Las primeras botellas de Santa María Magdalena se produjeron en la vendimia de 2021, y un año después fueron enviadas a ferias y premiaciones internacionales. “Y ganamos casi todas”, cuenta Alejandra orgullosa. De hecho, el Mosto Verde Torontel se llevó la máxima medalla en el prestigioso IWSC, del Reino Unido. También han recibido galardones en competencias de Portugal, Estados Unidos, España, entre otros.
Asimismo, la Bodega Santa María Magdalena es de las pocas que producen la variedad Albilla,
una cepa que se suele usar en combinación con otras uvas. “Lo elaboramos como pisco puro y se ha convertido en el favorito de muchos clientes”, añade Alejandra.
UN FUTURO PROMETEDOR
Santa María Magdalena no solo es dirigida por una nueva generación de pisqueros, sino que la mayoría de quienes conforman su planilla son mujeres, entre ellas, la misma Alejandra Jordan y Melissa Zevallos, jefa de bodega. Un plus que, sin duda, ha tenido mucho que ver en la revalorización del pisco.
Aunque el pisco de Santa María Magdalena se ha estado vendiendo con éxito por canales digitales, en julio próximo se iniciará la venta en el circ
uito retail y lanzarán sus nuevas etiquetas en botellas de 750 ml. “Cabe resaltar que nuestras botellas son numeradas, y ello es importante para los nuevos conocedores y para darle ese halo de sofisticación propio del pisco”, comenta.
La gerenta general señala que en un futuro no muy lejano desean exportar y llegar cada vez a más jóvenes. “Hay que devolverle al pisco su lugar en el país, y que se luzca con orgullo en los bares de los peruanos”, finaliza.
Contacto
Si deseas conocer más sobre Bodega Santa María Magdalena, puedes comunicarte al
teléfono: 967 491 627, y también ingresar a su página web: www.bodegasmm.com, o contactarlos a través de sus redes sociales en Instagram (@bodega.smm) y Facebook (@bodegasantamariamagdalena).
Fuente: Revista Cosas